Toda mi ropa huele a cuando estabas.
Seria al abrazarte no lo entiendo
o que estuviste cerca y se quedo prendido.
Si acerco mi nariz al hombro o a la manga, te respiro.
Aroma de placer, de recostarme en ti mientras dormias.
Por mucho que la lave, mi ropa lo conserva:
es un perfume dulce que me alivia
como vestir mi carne con tu piel.
Y esta durando mas que mi recuerdo.
Tu rostro en mi memoria se disipa,
casi puedo decir que he olvidado tu cuerpo
y sigo respirandote en las prendas
que, al tiempo que me visten, te desnudan.
De tanto olerte en mi, tu olor es mio.
Tu olor era mi olor desde el principio,
fue siempre de mi cuerpo, no del tuyo,
de un cuerpo que lo tengo a todas horas
para quererlo entero como jamas te quise
y olerlo de los pies a la cabeza.
Quien sabe tu a que aspiras sin este efluvio mio,
sin mi esencial fragancia.
Estando en compañia, seras siempre el ausente
igual que si te fueras o no hubieras llegado.
Pues no oleras a nada, no dejaras recuerdo
ni podras despertar autentico deseo
ni embalsamar las yemas de los dedos
que un dia te acariciencon un perfume fisico y concreto.
Seras para el olfato de los otros
como un espejo para los vampiros.
Y yo atesorare este perfume dulce de mi cuerpo
que descubri contigo.
Si quieres existir, respiralo de nuevo.
jueves, enero 05, 2006
Perfume de tu piel
Etiquetas:
Poesia
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