martes, marzo 28, 2006

Mi cuerpo no es la casa, es el camino. Mi cuerpo nunca empieza donde termina. Se alarga en las ma�anas, se recoge en las noches y es ligero en las tardes cuando llueve. Mi cuerpo no es mi cuerpo, es la huida. Se escapa por las manos y regresa radiante, cuando quiere, con los pies blandos en la tierra. Mi cuerpo se alimenta de mi cuerpo. Aprende del calor y del frio, de la luzde la sombra. Se conoce a si mismo; No se enga�a. La cabeza, en cambio, es la herida.

No hay comentarios.: