León símbolo de la valentía y de la nobleza, vibra en los himnos, flamea en las banderas. La hiena, símbolo de la cobardía y la crueldad, no vibra, ni flamea, ni custodia nada. El león se dedica a rugir. Sus hembras se ocupan de cazar, mientras el macho espera. Cuando la comida está lista, el macho se sirve primero. De lo que sobra, comen las hembras. Y al final, si algo queda todavía, comen los cachorros. Si no queda nada, se joden. La hiena tiene otras costumbres. Es el caballero quien trae la comida; y él come al último, después que se han servido los niños y las damas. Para elogiar, decimos: es un león. Y para insultar: es una hiena.
La hiena se ríe. Por qué será.
1 comentario:
Porque no le queda otra, a la imbécil.
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